Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo calificó como “pura politiquería” la presión de la oposición para que se investigue al expresidente Andrés Manuel López Obrador por el caso de huachicol fiscal, un escándalo que involucra a altos mandos de la Secretaría de Marina (Semar) y que ya derivó en la detención de 14 personas.
En su conferencia matutina del 10 de septiembre de 2025 en Palacio Nacional, Sheinbaum explicó que el caso se originó en marzo pasado con un buque que ingresó a México y dio pie a las órdenes de aprehensión. “En realidad hay que llamarle contrabando, porque huachicol es cuando se pica un ducto. Este caso es contrabando de combustible porque no paga impuestos: viene de Estados Unidos en un buque y al entrar a México reporta que no es combustible para evadir impuestos. Ese es el modus operandi”, aclaró.
Por su parte, Ricardo Anaya Cortés, coordinador de los senadores del PAN, exigió una investigación directa contra López Obrador y el extitular de la Semar, Rafael Ojeda, debido a la participación de altos mandos navales. Anaya recordó que el expresidente siempre aseguró que estaba al tanto de los casos de corrupción en su gobierno y cuestionó cómo no habría sabido de un caso de tal magnitud.
El legislador calificó el incidente ocurrido en Tamaulipas, con la detención de 14 personas, como “el escándalo de corrupción más grande de la historia del país”, y aseguró que se requiere una explicación clara sobre la responsabilidad del expresidente y de la cúpula de la Marina en el caso.
El choque de versiones evidencia la creciente tensión entre la 4T y la oposición, que busca capitalizar políticamente un caso que ha sacudido a la opinión pública, mientras el gobierno actual insiste en que se trata de maniobras políticas y no de un señalamiento judicial contra López Obrador.